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Nescit vox missa reverti

(La palabra pronunciada no sabe regresar)

"Horacio"

©El grito de printova. PROTECCIÓN DE DERECHOS DE AUTOR.

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Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.


domingo, 21 de marzo de 2010

COMPAÑERO


No hay manera de descifrar por qué nuestro corazón necesita estar acompañado. La soledad es una losa demasiado grande y requerimos de una compañía que esté a nuestro lado para compartir, reír, luchar y llorar juntos. La vida, con suerte, es muy larga para caminar solos.
Cuántos altibajos debemos soportar, cerca, siempre muy cerca, tenemos ese compañero o compañera que nos brinda su hombro para sujetarnos y proseguir.
Hoy es un día muy especial para mi “Compañero de camino”, y que mejor forma de decirle cuanto me importa, aunque él ya lo sabe, que escribiéndole una poesía.


COMPAÑERO

¡Tú estabas allí!
Donde no hay explicaciones,
donde no quedan palabras.

Sonata de sentimientos
me gritan tu nombre,
como pétalos que vuelan acariciando el aire.

Melodioso tintineo,
de sensación relajada.
¡Te quiero!
Es todo cuanto poseo

Refugio de ensoñación
donde vaga mi entusiasmo,
así eres compañero,
mi gran deseo.

Almíbar suave que cubre mis labios,
de algodones blancos.
La piel quemada por años.
Recelosa de lo que ayer me diste
y el tiempo nos lo ha quitado.

Carcajadas de burbujas dibujan tu rostro,
chispeantes me arrebatan la sonrisa.
Brillos plateados en los cabellos,
rodean las fisuras del confín de tus mejillas.
Y me antojo dibujar tu aliento,
cálido y curioso.
¡Cuánto te amo!

Muchacho,
a veces pienso,
qué pequeño es nuestro mundo,
y qué grande nuestro amor.

Compañero de ojos dulces,
mi travieso sueño grande,
quiero deleitarme
en la estela de tu imagen.

Y te siento,
a veces tan cerca.
a veces muy dentro,
y aquí sigues, a mi lado,
tú, fiel aliado.

Aguardo el resplandor de tus palabras,
fiero consuelo de altibajos,
eres cayado en mis manos,
hombro implacable
de mis llantos rotos.

La vida nos cerró puertas
que encadenados tiramos.
largo camino andamos,
mucha dicha albergamos.

Compañero,
tú y yo,
cobijo en nuestros silencios.
¿Cuánto amor llevamos dentro?
¿Cuánto amor podemos darnos?




Amar no es mirarse el uno al otro; es mirar juntos en la misma dirección.
Antoine de Saint-Exupery

4 comentarios:

  1. Precioso. Felicidades.

    Corto es el camino, si vienes conmigo.
    Mián Ros

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  2. Hola Printova:
    Hermoso poema para tu compañero de camino. Cuando la soledad alcanza mi mombre cerca de tu refugio estare, no hables, los silencios saben a amor.

    Besos,
    Tessa

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  3. Hola Tessa. Cuanta razón tienes, los silencios saben a amor. Gracias por pasar por aquí.
    Un beso.

    ResponderEliminar

Gracias por tus palabras.