------------------------
---------------------



Nescit vox missa reverti

(La palabra pronunciada no sabe regresar)

"Horacio"

©El grito de printova. PROTECCIÓN DE DERECHOS DE AUTOR.

©El grito de printova. PROTECCIÓN DE DERECHOS DE AUTOR.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons.


miércoles, 27 de octubre de 2010

POETA

"Un poeta es un ruiseñor
que se posa en la oscuridad
y canta para alegrar
su propia soledad
con dulces sonidos. "
Shelley

"Los poetas son hombres
que han conservado sus ojos de niño."

León Daudet

"La poesía no tiene tiempo,
el que la lee la rescata,
la hace presente
y luego la regresa a su eternidad."
Doménico Cieri Estrada



POETA

Mordiste el silencio
en tu refugio recio,
deshilando mundos,
abstraído y solo,
desgarrando anhelos,
que vas encajando.

Poeta nacido
de pluma y tintero,
extraño bohemio,
iluso llamado.
Acá en utopías,
posas tu llanto,
en gotas que aúllan
penares lejanos.

Guardián de un suspiro,
amarrado al viento,
señor y verdugo
de tu frágil sueño.

Con alma de ciego
y espinas en tu mano
sientes el fuego
del poema arcano.

No eres comprendido
pero si admirado,
eres un loco
de verso creado.


Printova

lunes, 25 de octubre de 2010

VOLAR


Photobucket

VOLAR

Volveré a desplegar aquellas alas,
sintiendo su aroma al caminar,
y todo cuando tuve en el pasado.
el recuerdo lo traerá.

Volveré a escribir entre las nubes,
las palabras que un día me guardé,
los versos y poemas que volaron,
perdidos quedarán.

Volveré a dejar suspiros sueltos,
danzando entre las musas al pasar,
la angustia y desconsuelo que brotaron,
de olvido yacerán.

Volveré a sentir las golondrinas,
que Becquer me hizo desear,
pero aquellas que perdieron el camino
aquellas,
nunca vendrán.

Volveré a rendir mis poesías,
al Poeta que un día me hechizó,
y todo cuanto deje en mis escritos,
al cielo volará.

Volveré a ser esa Printova,
que de niña soñaba con tallar
estrofas en el brillo de una estrella,
y a la luna recitar.

Si un día decaigo de mi empeño,
contenta pues yo he de quedar,
mi vuelo de poeta en este mundo,
ese... no morirá.

Printova
Photobucket

domingo, 24 de octubre de 2010

21 OTOÑOS JUNTOS



Te regalo mi universo,
tallado en sueños reales,
incrustado de diamantes,
con mil lunas por pilares.

Te regalo los otoños,
que entre las estrellas cuentes,
pues veintiuno son pocos
para mi vida...
amarte.

Mis deseos, todos juntos,
en esta caja los guardo,
entre caricias y abrazos,
bajo el cielo de tus rasgos.

La sonrisa se ha vestido,
engalanada de dicha,
quiero estar bella en tu alma,
como tu estas en la mía.

Y en el parque del recuerdo,
donde los bancos son viejos,
nos prometimos cariño,
en la noche de los tiempos.

Veintiún otoño juntos,
veintiún tesoros nuestros.
Tan importantes todos,
como serán los próximos.

Printova

Photobucket


Con todo mi cariño a mi marido

miércoles, 20 de octubre de 2010

EL OTOÑO

Photobucket



OTOÑO

Tapiz de melancolía
cubre las sendas.
Entre hojarasca,
los días pasan.
Nostalgia olvidada,
la bruma llora,
tiñendo el aroma
en cada rama.

Pinceladas de ocre
doran el monte
tuestan colores,
vuelan pasiones.

Bello paisaje
de adorno triste,
versos posaste
con tu ropaje.

Duerme el silencio,
sobre el musgo quieto,
cruje el aliento
en el camino seco.

Se esparce al aire,
el frío cercano,
proveyendo frutos,
para el crudo invierno.

Caduca la vida,
nace la espera,
los brotes aguardan…a la primavera.


Printova

domingo, 17 de octubre de 2010

EL AMOR



Photobucket
EL AMOR

Nací para hacer daño
a quien me quiera,
rasgar sobre las llagas
aún sangrantes,
beber del llanto
que me des.

Nací por que llamaste tu a mi puerta,
pidiendo mis cadenas en tu piel,
rogando que a tu lado me quedara,
y aquí estoy,
saciándome de ti.

Nací en tu alma débil
y me hice fuerte,
rompiendo tu equilibrio
y lucidez,
haciéndote llorarme
hasta dañarte,
y aún así...

¿Por qué me quieres en ti?


Photobucket

Printova

jueves, 14 de octubre de 2010

LA DAMA Y EL MARINERO

LA DAMA Y EL MARINERO

Brillaba su mirada bajo el cielo,
caminaba en silencio,
la acariciaba el viento.
Fue hundiendo sus pisadas en la arena,
chocando las olas muertas,
sobre su piel morena.

Mira la fina línea
que separa el cielo y mar.
Marinero que marchaste
y olvidaste regresar.
La bella dama te aguarda

y tú nunca volverás.


La luz del faro ahuyenta
por momentos su penar,

imagina entre las sombras,
a su valiente llegar.

No estés triste amada mía,
que ahora vivo bajo el mar.
Jamás olvidé tu sonrisa,
ni tu rostro de cristal.

Mi último aliento, fue tuyo,
un resplandor me lo trajo,
tus labios rozaron los míos,
y las aguas me abrazaron.

No tienes ya que esperarme
el barco no volverá,
mi vida quedó en la mar,
y allí he de regresar.

Entre la fría bruma,
el marinero marchó.
La dama quedó llorando,
a quien se llevó su amor.

Bajo la infinita noche,
arropada por luceros,
se adentró en las tibias aguas,
y se durmió bajo el cielo.

Si las estrellan hablaran,
entre ellas los oirías,

felices junto a la luna,
ya sin ninguna penuria.

Hoy caminan unidos,
sobre las constelaciones,
la mar unió sus penares,
y no volvió a separarles.


viernes, 8 de octubre de 2010

POESÍA NEGRA


Triste, ausente, llena de miedos y llantos, así es la poesía negra, desgarradora de momentos que todos pasamos, malos, odiados, socavones en la vida de cada uno, donde caemos en un abismo largo y profundo donde no vemos fondo, aunque al final salgamos y quede ese sabor amargo, ácido que el tiempo sólo puede disfrazar pero nunca borrar.

Aunque un día descubres que la vida se merece una segunda oportunidad y renaces como el ave fénix, de entre las cenizas y comienzas un camino hacia el olvido...



TRISTEZA

La oí llegar, al caer la tarde,
con sus pasos susurrantes,
deslizando la mirada,
en su mundo inerte.

Me miró, ¡siempre lo hacía!
y luego miró el horizonte.
tenía por compañero
su pequeño cuadernillo,
vagabundo de suspiros,
ya envejecido.

Dejó caer su agonía junto a mí,
¡sentí un escalofrío!
¿por qué me miraba así?
Cada tarde la esperaba,
Para compartir silencios,
Era dulce su presencia,
misteriosa,
pero invisible y vacía.

Cayeron las horas
Y con ella
Nos envolvió la noche,
¡siempre lo hacía!
Me voy, sentí que decía,
Y desapareció en la niebla.

Mañana al caer la tarde,
¡volverá!
ausente de vida,
pérdida en su bruma,
¡volverá!
y quizás entre recuerdos y penas
la pregunte:
Tristeza, ¿cuándo me dejarás?



EL ESPEJO

Abrí la puerta
Y de frente la vi.
Quieta, callada, inmóvil,
como una estatua de cristal,
derritiéndose entre lágrimas.

Coge mi mano y se fuerte,
que no vean que te detienes.
Lucha pequeña ante ellos,
no pueden más destrozarte.

Fijó su mirada en la mía
y me dio miedo mirarla,
leí en sus ojos cansancio,
y en su llanto gran rencor.

¡Háblame! No enmudezcas,
grita que siente tú alma,
lanza tú odio a la vida
grita la ira que llevas.

Abrí la puerta y comprendí,
que mi reflejo estaba allí,
llorando en aquel rincón,
sola, sin protección.

Era yo, frente a ese espejo,
yo ante mis temores.
Cerré la puerta de golpe
me quedé quieta y callada
y no volví…
No volví nunca a mirarme.

NO PERDONO

Te miro y me das miedo,
Siento pasos acercarse y aún estás lejos,
desearía no estar aquí,
que la tierra se me abriera
y mi vida se desvaneciera.

Ausente contemplo tu rostro.
Hoy vi tu llanto,
y viste el mío.

Quería ser fuerte
y la impotencia ganó,
mis armas son vanas
ante tanto dolor.

Nunca podré perdonar
la herida que nos han hecho.
El odio ha enraizado.
Todo es abstracto,
absurdo y falso.
Si el silencio se oye,
he chillado entre las sombras.

No perdono, no,
y viviré junto a ello,
disfrazando mi sonrisa,
ocultando mi dolor.
Taparé mis cicatrices
siempre abiertas.
Fingiré que ya pasó
y mis llagas cubriré.

Ahora nos queda seguir.
Tú has cambiado,
la injusticia te ha hecho mella,
y aún te asfixias en preguntas,
que no puedo responder

A mí me queda la ira.
Reconstruir lo dañado,
construir otro camino,
sobrevivir,
levantar lo que se hundió.
Pero nunca olvidar.
Ni en mil vidas perdonar.


Printova

jueves, 7 de octubre de 2010

A TU LADO

A TU LADO

Desperté,
acurrucada en tu pecho,
sintiendo el aroma
de tu piel desnuda,
acariciada y deseada,
cada instante
de la vida.
Tu corazón,
latía tranquilo,
junto al mío.
Tus brazos,
me rodeaban,
dormías,
cerré los ojos,
dichosa.
Cuando el alba rompa,
seguirás ahí,
como el primer día.


Printova

Photobucket